La de 2010 ha sido una pretemporada atípica, pues a pesar de que los circuitos han visto rodar a los monoplazas tal y como lo hicieron en los pasados años, fuera de las pistas ha habido de todo. Lo primero fue la expectación generada por la llegada de Alonso a Ferrari y la de Schumacher a Mercedes, algo que no se vive todos los días. Se notó en la asistencia récord a los entrenamientos y en el fervor colectivo de la afición, que espera desde hace semanas que se enciendan los semáforos y todos se peguen en los trazados del calendario.
Pero lo que de verdad ha hecho que esta pretemporada diferente a las demás ha sido la inclusión de las nuevas escuderías en la parrilla de la Fórmula 1. Había interés en seguir las evoluciones de las mismas y comprobar si de verdad podrían llegar a disputar el primer Gran Premio o se quedarían en el camino. Finalmente vimos a dos de las cuatro poner sus coches en pista, con sus respectivos problemas, mientras las otras dos han sido incapaces de llegar a tiempo a los entrenamientos y a día de hoy siguen sin oficializar su presencia en el mundial.
Así, a falta de, como digo, sólo diez días para que empiece el campeonato 2010, sólo once de las trece escuderías han acumulado kilometraje con sus monoplazas, y he aquí donde encontramos el primer problema, que cae por su propio peso. Llegaremos a Bahrein con cuatro coches a estrenar y otros cuatro con serios problemas. Si a ésto le añadimos que las demás escuderías tampoco están exentas de sufrir percances en el inicio del campeonato, la combinación puede ser explosiva.
Y es que sólo hay que echar la vista atrás un par de años. En 2008, los severos cambios en el reglamento nos dejaron un GP inaugural en Melbourne que se convirtió en la carrera en seco que menos pilotos finalizaron de toda la historia (7), y en la que se acumularon hasta quince abandonos, cinco de ellos en una primera vuelta completamente loca. En el GP de Australia 2009 no hubo tantos abandonos a pesar de los cambios en el reglamento (en especial los aerodinámicos), pero en la primera vuelta volvimos a ver el nerviosismo de los coches por el trazado semiurbano australiano. Además, en ambas ocasiones vimos aparecer al safety-car, que lo hizo tres veces en 2008 y dos en el pasado año.
En este 2010, con las modificaciones en los depósitos de los coches que han obligado a cambiar ligeramente la aerodinámica y harán que cambie enormemente la conducción (sobre todo en las primeras vueltas) y demás cambios como la anchura de los neumáticos, es bastante probable que veamos en Sahkir lo que estamos acostumbrados a ver en Melbourne. Pero además, teniendo en cuenta que Lotus y Virgin tienen serios problemas de fiabilidad, y que dos escuderías a penas tendrán tiempo para poner a punto sus coches antes de la celebración del Gran Premio, todo apunta a que el nuevo safety-car que estos días ha presentado Mercedes será el primer líder de carrera en Bahrein.
No quiero ni imaginarme cómo será la carrera en su totalidad, y menos teniendo en cuenta que Sahkir no es ni mucho menos un circuito divertido, pero estoy seguro de que las cosas cambiarán respecto a lo que vimos el pasado año en ese mismo lugar. Entonces el de Barein fue el cuarto Gran Premio del año y el mayor tostón de la temporada. Aunque si nos remontamos a años atrás, el GP de Bahrein nos traerá buenos recuerdos...pero esa es otra historia que analizaremos en su debido momento.
Imagenes: Bahrain International Circuit (flickr) y Daylife
La verdad es que va a ser un mundial muy abierto y apretado entre Red Bull, Mclaren, Ferrari y Mercedes GP, por ello yo creo que puede llevarse el gato al agua cualquiera. Un saludo.
ResponderEliminartienes razon, con todos estos cambios no sabemos como saldran las cosas... todo `puede pasar, ya falta cada vez menos, como pasa rapido el tiempo :)
ResponderEliminarYo sólo espero que los crash test sirvan para algo. Yo la verdad que el tema de los nuevos han dado mucha salsa que creo que hacía falta, pero ver a Hispania (Antiguo Campos) y Stefan (Ya que USF1 han dicho bye bye) no han rodado absolutamente nada (Stefan ha pasado el crash test? Creo que no!) y saliendo en la parrilla me parece superpeligroso. Lo de Virgin autodestruyendose el coche enmedio de esa primera vuelta podria ser fatal.
ResponderEliminarA mi me ha gustado la idea de meter nuevos equipos. Aunque (1º) No se han elegido a los mejores (Pero eso no ha sido culpa de ellos) y (2º) el verdadero problema ha sido la no-limitación de los presupuestos, que desde un principio ha sido una tontería como un camión. Pero si al principio son chicanes móviles, el año que viene serán absorbidos, eliminados, evolucionarán, se fusionarán... total, que todo dará cambios y salsa. Lo que hay que evitar son los Bravo F1 (Campos... ya van 2) o un Lola 96 y los accidentes. Y eso es lo que parece que no interesa.
Yo deseo mucha suerte a Virgin y a Lotus, y a ver si Hispania llega bien (que ahora parece que va por buen puerto... aunque sin tests) y ya veremos si hay alguno más.
Los nuevos van a quedar tan retrasados que las apuestas van a ser por ver en qué vuelta los pasan
ResponderEliminarBueno, la FIA de momento ya nos ha quitado a dos coches que podrían desestabilizar la parrilla en Bahrein, ya que USF1 no ha sido inscrita y su lugar no lo ocupará ningún otro equipo. En cambio, Hispania Racing sí estará en Bahrein y pondrá en pista a sus dos coches sin haber entrenado en pretemporada. Lo más probable es que hagan el ridículo en la primera carrera, tal y como se piensa que ocurrirá con Lotus y Virgin. Ya veremos cómo terminan el año si es que lo terminan.
ResponderEliminarAdemás, la FIA aún no ha hecho oficial al piloto que acompañará a Bruno Senna en Hispania. Y estamos a poco más de una semana...ver para creer.
Con dos coches si probar absolutamente nada, con otros cuatro nuevos, en Bahrein puede pasar de todo. Saludos
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