Análisis tras el GP de España. Desigualdad pareja

A pesar de que muchos digan hoy que la de España fue una carrera aburrida, sin salsa, sin acción, y quizás alguno se atreva a comentar que sin interés, yo creo que el GP de nuestro país no sólo ha traído más luz a nuestros ojos, sino que nos ha mostrado datos muy relevantes, que analizados con prudencia nos pueden llevar a conclusiones de cómo puede desarrollarse la temporada. Para empezar, dejaré clara la conclusión más importante que nos ha dejado la llegada a Europa de la F1. Me refiero a la gran igualdad en tiempos que existe hoy en día entre muchos de los equipos participantes. Para muchos, al ver la tabla de los puntos, puede ver una enorme desigualdad entre Brawn GP y el resto, y no le faltará razón. La diferencia de este año con los anteriores es que de los diez puntos del primero a los seis del tercero no hay las mismas décimas que, me atrevo a decir, en los últimos diez años. Es más, creo que si muchos de los que hoy en día ven todo negro, porque el coche de su piloto preferido está a dos o tres décimas de los Brawn, hiciesen una comparación con lo que esas tres décimas supondrían en otros años, se quedaría a cuadros. Por ejemplo, y hablo ya de Alonso respecto a Button. Su diferencia puede estar alrededor de las cuatro décimas, o cinco dependiendo del circuito. Su posición actual en una carrera normal sería la novena, tras Brawn GP, Red Bull, Ferrari y Toyota. Bien, pues esas cuatro-cinco décimas, en años como el 2002 (el caso más extremo), harían que Alonso estuviese entre los cinco mejores, con muchas opciones de podio en cada carrera, con un rendimiento parecido a los BMW-Wiliams de Ralf y Montoya. Y, sin irnos tan lejos, cuatro eran las décimas que tenían el año pasado respecto a Ferrari a final de temporada (quizás tres), y estaba luchando por podios, en quinta posición en una carrera normal. Así que, podemos ver, por si alguien no lo tenía claro aún, la gran diferencia que ha habido en la Fórmula 1 en este 2009, donde hemos pasado de dominio por parte de una o dos escuderías, a una igualdad grande entre al menos seis de ellas, que en poco tiempo podrían estar luchando por podios. Obviamente, y como comenté en una pasada entrada, para algunos de esos equipos, como Ferrari, Renault, McLaren o Williams, el mundial de constructores está terminado, y el de pilotos casi imposible, teniendo en cuenta no sólo su propio margen de mejora, sino también el de Red Bull. Y es que la igualdad en tiempos cada vez es mayor, pero hace tres carreras había una mayor diferencia entre los primeros, lo que ha creado una gran desigualdad en puntos. Porque lo que marca este año las diferencias son los puntos. Muchos afirman que si el sistema de puntuación fuese por victorias ésto estaría casi terminado, y no les falta razón, pero algunos equipos como Ferrari, que se les ha visto en progresión ascendente sobre todo aquí en España, estarían cuatro victorias por detrás de Button, lo cual se puede remontar en cuatro carreras aunque Button quede segundo, y no a alrededor de 40 puntos, lo cual supone una remontada heroica y poco probable incluso en las 12 carreras que restan. Me diréis que por qué defiendo ahora el sistema de victorias, y no lo defiendo para ahora, sólo me parecería justo en caso de igualdad en el reglamento para todos, y eso sabemos que es algo que no existe en la F1. Con una igualdad legal, sin lagunas desde el principio de temporada, no está tan mal el campeonato por victorias que van a imponer en 2010. Todos partirían de la misma base, y la F1 sería más clara y menos aburrida. Todos estarían obliados a mejorar más si cabe que en la actualidad, y se trabajaría mucho más en los coches, algo que es esencial en la F1, para luego en carrera llevarlos a la cima. Obviamente ésto lo discutiré mñas adelante, cuando empecemos a valorar lo que la estrategia significó en la F1 a lo largo de estos años y lo que será el 2010 sin esa estrategia y con campeón por victorias. Ahora lo que nos interesa es la carrera de Montmeló, donde volvimos a vivir una salida loca. Los monoplazas son muy nerviosos este año, y en la primera vuelta se nota, pues todos van a saco buscando los huecos, y en ocasiones los coches parecen mostrarnos en sus movimientos la tensión que el piloto tiene en ese difícil momento, con frenos, neumáticos y demás aún fríos. Obviamente no vimos una vuelta completa debido al accidente entre Trulli y Sutil por un lado, y el de Bourdais y Buemi por otro (Trulli tiene ahora el récord hisórico de abandonos en la primera vuelta, con 13). Salió de nuevo el safety-car, que nos acompaña en prácticamente la totalidad de las carreras de este año, a pesar de que en Barcelona es muy raro que salga (sólo faltaría que en Bahrein también hubiese salido, con las escapatorias que tiene el circuito), pues sólo salió un par de veces en los últimos años, una de ellas en 2008 con el accidente de Kovalainen. Tras esa primera vuelta, en 2007 vimos 4 adelantamientos en pista, meintras que en 2008 vimos sólo 2 hasta el final de la carrera. En 2009 hemos vivido al menos 6, que yo recuerde. El primero de ellos fue el mejor sin duda, el doble que se hicieron Alonso y Webber en la recta de meta tras la marcha del safety. Pero con adelantamientos o no, si la carrera fue interesante fue gracias al aspecto estratégico de la misma. Durante gran parte de la misma, entre la primera y segunda parada de los monoplazas (la primera y la tercera para los que iban a tres) hubo una lucha que no vivimos en otros Grandes Premios. Una lucha décima a décima entre los siete primeros para no perder demasiado tiempo con sus predecesores, y en algunos casos para pensar en metas mayores. Vimos la lucha entre los Brawn, de la que ya hay dos versiones, en la que Barrichello fue a tres paradas y Button a dos. Barrichello afirmó, tras terminar tras su compañero, que no quiere volver a ser el segundón de nadie, y que al mínimo indicio de ello se marchará del equipo. Ross Brawn por otra parte acusa al brasileño de haber perdido él mismo la carrera con un segundo stint muy lento, incluso a veces más lento que el segundo de Button, quien iba mucho más largo. ¿Mi opinión? Pues teniendo en cuenta quién está al frente del equipo y quién es el segundo piloto de la escudería, es la misma que la de Rubens, pues estamos hablando de un equpo Ferrari al que le ha caído lejía encima, y qe ahora van de blanco. Buscan lagunas, se aprovechan de ellas, tienen favores de la FIA y ahora tienen un segundón. Vamos, espíritu Ferrari en estado puro, el que todos quieren para Alonso. En fin, que me vuelvo a ir por las ramas. La otra lucha estaba entre Massa y Vettel. Muchos acusan a Vettel de hacer una mala carrera. Yo no. Poneos en su sitio y tratad de batir en la salida y durante 66 vueltas a un coche con KERS. Imposible, y menos si hablamos de un Ferrari que ha mejorado considerablemente. La mala carrera de Vettel no fue culpa del alemán, sino del equipo, quienes tuvieron la brillante idea de copiar la estrategia de Massa en vez de hacer algo diferente en la primera parada, lo cual hubiese sido lo más lógico. Por detrás, Webber venía quinto, y muchos lo han destacado del resto por terminar tercero. Vale, ha hecho una gran carrera con muy buenos tiempos, pero no ha sido el mejor ni de lejos, pues si terminó tercero fue gracias a que Massa frenó a Vettel tras la segunda parada del australiano, haciendo ambos peores tiempos incluso que Mark, quien ya había recortado diferencias antes de entrar a boxes. Así, tras la parada de ambos, Webber salió delante. Ferrari, ¿qué decir de Ferrari?, pues que han dado vergüenza ajena esta vez, si ya antes daban pena por sus resultados. Kimi fuera por un problema hidráulico y Massa salvando los muebles con su sexta plaza tras tener que ahorrar combustible por no tener suficiente para terminar el Gran Premio. Error infantil de Ferrari, quienes parecen seuir jugando a los videojuegos en vez de pensar en que en un futuro próximo pueden tener a un bicampeón del mundo en sus filas. Ese bicampeón del mundo fue quien brilló el domingo ante los suyos, regalándonos un carrerón, sin duda el mejor del año tanto por resultado como por ritmo. Quinto, gracias al error de Ferrari, mejorando el también ficticio de Australia, pero quinto al fin y al cabo. Su compañero esta vez no nos sirve de comparación, pues tuvo problemas en el monoplaza tras un toque en la salida (versión de Flavio Briatore), o quizás porque su coche es una cobaya donde probar las innovaciones futuras (versión personal) como quería hacer Newey con los dos Toro Rosso, quienes abandonaron el pa primera vuelta echando su deseo por tierra. Pero no hace falta compararlo con Piquet, basta hacerlo con Webber, quien tiene un coche ganador y del que le separaban sólo unas pocas décimas por vuelta durante esa parte estratégica de carrera de la que hablé, a veces incluso siendo más rápido que el Red Bull. Por detrás, destacar la caída de McLaren, quienes ni siquiere han podido al menos mejorar, como sí lo hicieron en Ferrari, y encima ven sólo a un coche cruzar la meta tras el abandono de Kovalainen con problemas en la caja de cambios. BMW sabíamos que seguiría en su sueño de 2008, el de tener ese coche ganador que ha pasado a ser casi el peor de la parrilla, mientras que Williams vuelve a demostrar que su coche tiene serias limitaciones, pues a pesar de portar el difusor desde el inicio de temporada, ya ocupan una posición trasera en la tabla, fuera de los puntos. El bajo rendimiento de los Toyota este fin de semana no tiene explicación aún ni para el propio Timo Glock, el único de los dos que pudo terminar la carrera, en décima posición, quien declaró que sus neumáticos morían al intentar pasar a Rosberg y que ni siquiera con aire limpio el coche le funcionaba. Trulli, por otro lado, confesó sufrir problemas de motor en la salida, de ahí su rezagada posición que le costó el accidente. Así que la carrera terminó animada gracias al fiasco de Ferrari, pero como digo, en ningún momento dejó de tener interés, y menos teniendo en cuenta que, como dicen todos, si el coche va bien en Barcelona, va bien el resto del año. Esperemos que Mónaco nos deje ver si los coches con menos opciones pueden acercarse a los puestos cabeceros. El año pasado Alonso tuvo su primera oportunidad de victoria, como él mismo reconocía, y la perdió. Esperemos que este año pueda estar arriba, pues si hay un circuito donde el Renault puede brillar este año, a la espera de las mejoras futuras (no nos olvidemos de Singapur), ese es el de Mónaco. De todas formas, espero también las mejoras de Red Bull, que seguramente les aúpen definitivamente al liderato. Así, iniciando una nueva subsección dentro de mi análisis de cada GP, concluyo lo siguiente: Lo mejor del GP de España ▲ Alonso: por su gran carrera, sus dos adelantamientos y su ritmo endemoniado de principio a fin. Button: por su victoria, acompañada de un "perdón Rubens", que le honra. Barrichello: por sus afortunadísimas declaraciones tras el GP. La afición: de nuevo muy presente en el circuito, aunque no llegásemos esta vez a los 100.000 Lo peor del GP de España ▼ Ferrari: por su nuevo abandono y su error de videojuego con la estrategia de Massa. Red Bull: por la pésima estrategia con Vettel, que le hizo perder todas las opciones de podio. La prensa inglesa: por sus nuevas y desafortunadísimas críticas de racismo hacia todos los españoles, sobre lo que haré una nueva entrada en próximos días.