Jenson Alexander Lyons Button nació en Frome, Inglaterra, y es hijo de Simone Lyons y John Button. Sus primeros pasos hacia el mundo del motor los dio con tan sólo ocho años de edad, compitiendo en karts y ganando la mayor parte de las pruebas que disputaba. A los nueve años ya había ganado el British Kart Super Prix, y en 1991 ganó el campeonato británico cadete de karting, tras ganar todas y cada una de las 34 carreras de esa misma temporada. En 1994 terminó cuarto en la categoría junior, compaginando su participación en el campeonato británico con victorias en el italiano y europeo.
En 1995 se proclamó campeón del campeonato italiano senior de karting y se convirtió en el piloto más joven en participar en el mundial de karting clase A. Jenson continuó pilotando karts hasta 1998, año en el que se pasó a la Fórmula Ford, logrando el campeonato británico y el subcampeonato europeo, así como venciendo en el festival de Fórmula Ford. En 1999 pasó a la F3 británica, siendo elegido rookie del año tras terminar tercero.
En el año 2000 dio el salto a la Fórmula 1 cuando Frank Williams, descontento con los resultados de Alex Zanardi, decidió escoger a Jenson tras unas buenas sesiones de entrenamientos del británico. En su primera temporada compartió equipo con Ralf Schumacher, hermano del por aquel entonces aún bicampeón del mundo Michael, y a quien iba a superar en más de una ocasión a pesar de la presión que tenía que soportar en algunos momentos. Sus mejores resultados en ese año fueron un cuarto puesto en el GP de Alemania y un quinto en el GP de Bélgica. Terminó el campeonato octavo con doce puntos, la mitad de los que consiguió su compañero.
En 2001 continuó teniendo contrato en vigor con Williams, pero pilotó para Benetton-Renault, en una temporada muy mala tanto para él como para la escudería, donde su mejor resultado sería un quinto puesto en el GP de Alemania (en la foto, junto a su compañero Fisichella, cuarto en la misma carrera), pero en la que terminaría decimoséptimo en la general sumando tan sólo esos dos puntos en tierras germanas.
2002 fue el año en el que Renault compró Benetton, y en el que Button compartiría equipo con Jarno Trulli y Fernando Alonso, en una temporada en la que se resarciría de la anterior, consiguiendo dos cuartos puestos en Malasia y Brasil, tres quintos puestos en San Marino, Europa e Italia, y dos sextos en Francia y Japón para sumar un total de 14 puntos y terminar el año en séptimo lugar, justo por delante de su compañero.
En 2003 cedería su sitio a Fernando Alonso en la escudería francesa y se pasaría a BAR, donde compartiría asiento con todo un campeón del mundo como Jacques Villeneuve. Con él tendría sus primeras tensiones en Australia, a pesar de las cuales logró superarlo holgadamente en el campeonato, siendo noveno con 17 puntos, por los seis que relegaron a Villeneuve a la decimosexta posición.
2004 iba a ser, hasta este año, su mejor temporada en la F1, en la cual terminaría tercero en el campeonato sólo por detrás de los intratables Ferrari de Schumacher y Barrichello, habiendo logrado un total de diez podios (cuatro segundos puestos y seis terceros), y habiendo puntuado en todas las carreras que consiguió terminar, para sumar 85 puntos. Además, logró la primera pole position de su carrera en Imola. A pesar de las complicaciones vividas en ese año, la escudería BAR terminó como subcampeona en el campeonato gracias al británico.Su compañero Sato fue octavo en el mundial con menos de la mitad de puntos que él. Sólo le faltó ganar un Gran Premio, algo que se le resistía.
En 2005 las cosas iban a cambiar para Jenson. A un inicio de temporada realmente pésimo con nueve carreras seguidas sin puntuar, le siguió un final realmente bueno, puntuando en todas y cada una de las diez siguientes, con dos podios incluídos en Alemania y Bélgica. Ese mismo año sufrió la exclusión de su equipo por dos carreras debido a una irregularidad. Button logró la segunda pole de su carrera ese año en Canadá, y terminó el campeonato noveno con 37 puntos, mientras que su compañero Sato sólo conseguiría uno.
En el siguiente año, 2006, Honda, marca que suministraba los motores a BAR, compraría la escudería británica. Jenson tenía contrato en vigor con Williams, y los planes del británico fueron la mayor polémica antes de iniciarse la temporada. Todo se solucionó cuando el inglés abonó una cantidad de dinero a Williams y pudo continuar corriendo para la escudería antiguamente conocida como BAR-Honda, y que pasaría a llamarse simplemente Honda. Tras una gran pretemporada, se hablaba de Honda como firme candidata al título, con Jenson a la cabeza y Barrichello a su lado como nuevo compañero. Pero por problemas relacionados con el chasis, finalmente no estuvieron a la altura. Jenson lograría comenzar la temporada con un cuarto y un tercer puesto y, tras lograr la pole position en Australia, las cosas empezarían a ir mal cuando a falta de sólo cien metros para el final de dicho Gran Premio rompía motor y abandonaba. A partir de entonces a penas pudo conseguir tres puntos y un cuarto puesto, hasta que llegó el Gran Premio de Hungría, y con él la ansiada victoria, seis años después de su debut.
Fue una carrera increíble en la que Jenson saldría decimocuarto tras una sanción por cambio de motor, y remontaría hasta el primer puesto (una de las mayores remontadas de todos los tiempos) para imponerse sobre el asfalto mojado de Hungaroring a Pedro de la Rosa, segundo, y Nick Heidfeld, tercero, beneficiado por el abandono de Fernando Alonso. Éste fue su mayor logro hasta el presente año.
Button finalizó realmente bien la temporada 2006, con un podio más, tres cuartos puestos y un quinto, cerrando el año en sexta posición con un total de 56 puntos, casi el doble que los que sumó su compañero Rubens, séptimo en la general.
En 2007 y 2008, sin embargo, iba a empezar la decadencia de la escudería nipona. El Honda RA107 (2007) fue una tortuga producto de un error de calibración en el túnel de viento, mientras que el coche de 2008 precipitó la salida de Honda del mundial a final de año tras una campaña realmente desastrosa. En esos dos años, Jenson sólo pudo meterse en zona de puntos en cuatro de las 35 carreras. En 2007 fue decimoquinto en el mundial con 6 puntos, superando a su compañero, que no logró ninguno, pero en 2008 la pérdida de motivación hizo que terminase el año en la peor posición de su carrera en la F1, decimooctavo, con sólo 3 puntos, y viéndose superado por Rubens, quien incluso lograría un podio ese año y terminaría decimocuarto con 11 puntos.
Quién le iba a decir a Button en esos momentos de desmotivación que 2009 iba a empezar de la forma que lo hizo. Ross Brawn rescató al británico del paro y se inventó un coche ganador a base de talonario y pillería para encumbrarle como campeón del mundo diez años después de su debut. Tan bueno fue el comienzo que en siete carreras Button había logrado el mejor arranque de toda la historia de la Fórmula 1 con 66 puntos por los 60 que había logrado Michael Schumacher en el estratosférico arranque de 2004. Todo cambiaría después, pues mientras Schumi ganaba doce de las primeras trece carreras, Button no volvería a ganar más.
Pero vayamos por partes. La temporada arrancaba en Australia con pole para el inglés y doblete en carrera para Brawn GP (así se llamó a la escudería tras la compra de la misma por parte de Ross Brawn) con Jenson a la cabeza. A partir de entonces, Button lograría el primer triplete de su carrera en Malasia, un tercer puesto bajo la lluvia de Shangai, y una serie de cuatro victorias consecutivas en Bahrein, España, Mónaco y Turquía para prácticamente doblar en puntos a todos sus rivales y enmudecer al mundo, que veía cómo la temporada debut de Brawn GP podía convertirse en histórica para la escudería inglesa, superando a la de Ferrari en 2004. Pero nada más lejos de la realidad. La aplastante superioridad de los Brawn se debía a los famosos difusores dobles que sólo tres equipos poseían a principio de temporada, y a medida que fue avanzando el año, las cosas fueron cambiando y Brawn se fue yendo hacia atrás.
Button comenzaría así una etapa de decadencia en la que, eso sí, no se bajaría de los puntos salvo en Bélgica por abandono, pero en la que, en nueve carreras, conseguiría menos de la mitad de puntos de los logrados en las siete primeras. Así, sus rivales se le fueron acercando, con Vettel y Red Bull a la cabeza, y con un Rubens Barrichello que, con el mismo coche, le superaría en cuatro de esas nueve carreras finales hasta que matemáticamente logró el título. Button llegó a Japón por primera vez en diez años con opciones de proclamarse campeón, pero no fue hasta la siguiente carrera,en Brasil, donde lo lograría. De los casi 30 puntos de ventaja respecto al segundo a mitad de temporada pasamos a la mitad, 15, pero suficientes como para proclamarse campeón.
Con su quinto puesto en el GP de Brasil, Jenson Button entraba en los libros de oro de la F1 al convertirse en el trigésimo primer campeón del mundo de la historia, el décimo campeón británico, y logrando el decimocuarto mundial para su nación, así como el segundo consecutivo tras el de Hamilton en 2008. Por fin había logrado el sueño de todo piloto, por fin podía decir, sin creérselo del todo, que era campeón del mundo de Fórmula 1. Fueron diez largos años, pero creo que un título compensa cualquier espera.
En 1995 se proclamó campeón del campeonato italiano senior de karting y se convirtió en el piloto más joven en participar en el mundial de karting clase A. Jenson continuó pilotando karts hasta 1998, año en el que se pasó a la Fórmula Ford, logrando el campeonato británico y el subcampeonato europeo, así como venciendo en el festival de Fórmula Ford. En 1999 pasó a la F3 británica, siendo elegido rookie del año tras terminar tercero.
En el año 2000 dio el salto a la Fórmula 1 cuando Frank Williams, descontento con los resultados de Alex Zanardi, decidió escoger a Jenson tras unas buenas sesiones de entrenamientos del británico. En su primera temporada compartió equipo con Ralf Schumacher, hermano del por aquel entonces aún bicampeón del mundo Michael, y a quien iba a superar en más de una ocasión a pesar de la presión que tenía que soportar en algunos momentos. Sus mejores resultados en ese año fueron un cuarto puesto en el GP de Alemania y un quinto en el GP de Bélgica. Terminó el campeonato octavo con doce puntos, la mitad de los que consiguió su compañero.
En 2001 continuó teniendo contrato en vigor con Williams, pero pilotó para Benetton-Renault, en una temporada muy mala tanto para él como para la escudería, donde su mejor resultado sería un quinto puesto en el GP de Alemania (en la foto, junto a su compañero Fisichella, cuarto en la misma carrera), pero en la que terminaría decimoséptimo en la general sumando tan sólo esos dos puntos en tierras germanas.
2002 fue el año en el que Renault compró Benetton, y en el que Button compartiría equipo con Jarno Trulli y Fernando Alonso, en una temporada en la que se resarciría de la anterior, consiguiendo dos cuartos puestos en Malasia y Brasil, tres quintos puestos en San Marino, Europa e Italia, y dos sextos en Francia y Japón para sumar un total de 14 puntos y terminar el año en séptimo lugar, justo por delante de su compañero.
En 2003 cedería su sitio a Fernando Alonso en la escudería francesa y se pasaría a BAR, donde compartiría asiento con todo un campeón del mundo como Jacques Villeneuve. Con él tendría sus primeras tensiones en Australia, a pesar de las cuales logró superarlo holgadamente en el campeonato, siendo noveno con 17 puntos, por los seis que relegaron a Villeneuve a la decimosexta posición.
2004 iba a ser, hasta este año, su mejor temporada en la F1, en la cual terminaría tercero en el campeonato sólo por detrás de los intratables Ferrari de Schumacher y Barrichello, habiendo logrado un total de diez podios (cuatro segundos puestos y seis terceros), y habiendo puntuado en todas las carreras que consiguió terminar, para sumar 85 puntos. Además, logró la primera pole position de su carrera en Imola. A pesar de las complicaciones vividas en ese año, la escudería BAR terminó como subcampeona en el campeonato gracias al británico.Su compañero Sato fue octavo en el mundial con menos de la mitad de puntos que él. Sólo le faltó ganar un Gran Premio, algo que se le resistía.
En 2005 las cosas iban a cambiar para Jenson. A un inicio de temporada realmente pésimo con nueve carreras seguidas sin puntuar, le siguió un final realmente bueno, puntuando en todas y cada una de las diez siguientes, con dos podios incluídos en Alemania y Bélgica. Ese mismo año sufrió la exclusión de su equipo por dos carreras debido a una irregularidad. Button logró la segunda pole de su carrera ese año en Canadá, y terminó el campeonato noveno con 37 puntos, mientras que su compañero Sato sólo conseguiría uno.
En el siguiente año, 2006, Honda, marca que suministraba los motores a BAR, compraría la escudería británica. Jenson tenía contrato en vigor con Williams, y los planes del británico fueron la mayor polémica antes de iniciarse la temporada. Todo se solucionó cuando el inglés abonó una cantidad de dinero a Williams y pudo continuar corriendo para la escudería antiguamente conocida como BAR-Honda, y que pasaría a llamarse simplemente Honda. Tras una gran pretemporada, se hablaba de Honda como firme candidata al título, con Jenson a la cabeza y Barrichello a su lado como nuevo compañero. Pero por problemas relacionados con el chasis, finalmente no estuvieron a la altura. Jenson lograría comenzar la temporada con un cuarto y un tercer puesto y, tras lograr la pole position en Australia, las cosas empezarían a ir mal cuando a falta de sólo cien metros para el final de dicho Gran Premio rompía motor y abandonaba. A partir de entonces a penas pudo conseguir tres puntos y un cuarto puesto, hasta que llegó el Gran Premio de Hungría, y con él la ansiada victoria, seis años después de su debut.
Fue una carrera increíble en la que Jenson saldría decimocuarto tras una sanción por cambio de motor, y remontaría hasta el primer puesto (una de las mayores remontadas de todos los tiempos) para imponerse sobre el asfalto mojado de Hungaroring a Pedro de la Rosa, segundo, y Nick Heidfeld, tercero, beneficiado por el abandono de Fernando Alonso. Éste fue su mayor logro hasta el presente año.
Button finalizó realmente bien la temporada 2006, con un podio más, tres cuartos puestos y un quinto, cerrando el año en sexta posición con un total de 56 puntos, casi el doble que los que sumó su compañero Rubens, séptimo en la general.
En 2007 y 2008, sin embargo, iba a empezar la decadencia de la escudería nipona. El Honda RA107 (2007) fue una tortuga producto de un error de calibración en el túnel de viento, mientras que el coche de 2008 precipitó la salida de Honda del mundial a final de año tras una campaña realmente desastrosa. En esos dos años, Jenson sólo pudo meterse en zona de puntos en cuatro de las 35 carreras. En 2007 fue decimoquinto en el mundial con 6 puntos, superando a su compañero, que no logró ninguno, pero en 2008 la pérdida de motivación hizo que terminase el año en la peor posición de su carrera en la F1, decimooctavo, con sólo 3 puntos, y viéndose superado por Rubens, quien incluso lograría un podio ese año y terminaría decimocuarto con 11 puntos.
Quién le iba a decir a Button en esos momentos de desmotivación que 2009 iba a empezar de la forma que lo hizo. Ross Brawn rescató al británico del paro y se inventó un coche ganador a base de talonario y pillería para encumbrarle como campeón del mundo diez años después de su debut. Tan bueno fue el comienzo que en siete carreras Button había logrado el mejor arranque de toda la historia de la Fórmula 1 con 66 puntos por los 60 que había logrado Michael Schumacher en el estratosférico arranque de 2004. Todo cambiaría después, pues mientras Schumi ganaba doce de las primeras trece carreras, Button no volvería a ganar más.
Pero vayamos por partes. La temporada arrancaba en Australia con pole para el inglés y doblete en carrera para Brawn GP (así se llamó a la escudería tras la compra de la misma por parte de Ross Brawn) con Jenson a la cabeza. A partir de entonces, Button lograría el primer triplete de su carrera en Malasia, un tercer puesto bajo la lluvia de Shangai, y una serie de cuatro victorias consecutivas en Bahrein, España, Mónaco y Turquía para prácticamente doblar en puntos a todos sus rivales y enmudecer al mundo, que veía cómo la temporada debut de Brawn GP podía convertirse en histórica para la escudería inglesa, superando a la de Ferrari en 2004. Pero nada más lejos de la realidad. La aplastante superioridad de los Brawn se debía a los famosos difusores dobles que sólo tres equipos poseían a principio de temporada, y a medida que fue avanzando el año, las cosas fueron cambiando y Brawn se fue yendo hacia atrás.
Button comenzaría así una etapa de decadencia en la que, eso sí, no se bajaría de los puntos salvo en Bélgica por abandono, pero en la que, en nueve carreras, conseguiría menos de la mitad de puntos de los logrados en las siete primeras. Así, sus rivales se le fueron acercando, con Vettel y Red Bull a la cabeza, y con un Rubens Barrichello que, con el mismo coche, le superaría en cuatro de esas nueve carreras finales hasta que matemáticamente logró el título. Button llegó a Japón por primera vez en diez años con opciones de proclamarse campeón, pero no fue hasta la siguiente carrera,en Brasil, donde lo lograría. De los casi 30 puntos de ventaja respecto al segundo a mitad de temporada pasamos a la mitad, 15, pero suficientes como para proclamarse campeón.
Con su quinto puesto en el GP de Brasil, Jenson Button entraba en los libros de oro de la F1 al convertirse en el trigésimo primer campeón del mundo de la historia, el décimo campeón británico, y logrando el decimocuarto mundial para su nación, así como el segundo consecutivo tras el de Hamilton en 2008. Por fin había logrado el sueño de todo piloto, por fin podía decir, sin creérselo del todo, que era campeón del mundo de Fórmula 1. Fueron diez largos años, pero creo que un título compensa cualquier espera.
Los ingenieros de Williams cuentan que la primera carrera en Spa Button se salió en una curva y volvió al box diciendo que la señal de 100 metros estaba mal situada. Todos rieron pero ante su insistencia avisaron a los comisarios que comprobaron que, efectivamente, la señal estaba retrasada. Así de bueno es Button. Lo malo es que se dejó llevar por el glamour, el dinero y las mujeres. Pero como piloto le da mil vueltas a Barrichello. Se lo merecía.
ResponderEliminar10 años que han tenido su fruto, gran fruto ahora, entra en el olimpo de los campeones y ya para siempre será recordado.
ResponderEliminarPor cierto su padre me cae genial, lo digo porque como siempre se le veía en las carreras, la verdad que su forma de ser, de estar y sus declaraciones siempre me han gustado. Saludos