Hamilton se sigue cubriendo de gloria

Todos estamos de acuerdo en que lo de Lewis Hamilton no es algo pasajero. También nos ponemos de acuerdo al decir que la suerte no juega una baza importante de cara a lo que le ocurre. Pues todos sabemos la calidad que tiene como piloto (que por si alguien no se entera, es baja). Y la misma calidad que tiene como piloto la demuestra tener como persona. Es verdad que pidió perdón a Kimi tras el incidente (aunque seguro que lo hizo entre dientes, pues mucho no añadió a su disculpa), pero el inglés sigue haciendo declaraciones y declaraciones, cada una con menos sentido que la anterior. No se puede negar que para eso sí que tiene calidad, para hacer las cosas cada vez peor y peor. Y superar lo que parece insuperable, de malo, claro. Porque la embestida a Raikkonen superó a mi parecer lo de Brasil y el "sanganchao en la puzzolana" de China, pero las declaraciones posteriores no son moco de pavo. Y si no leed lo que dice el piloto de McLaren-Mercedes:

"La regla es ridícula. ¿Cómo pueden poner un semáforo en rojo al final del ''pit-lane''? Pero así es la norma y lo acepto. El incidente no ha variado la confianza que tengo en mí mismo, no me ha costado ni un día recuperarme. No estoy decepcionado y ya estoy deseando que llegue Magny-Cours"

Lo dicho, impresentables declaraciones. Seguro que si fueras tú el que iba primero no creo que le echaras las culpas al semáforo, amigo Lewis. Si tú fueras el embestido había que ver lo que esa boquita soltaba tras el accidente y la reacción que hubiéseis tenido tanto tú, como Ron Dennis, como tu padre. Pero bueno, tampoco insistas mucho sobre lo de que es una regla ridícula, que todavía la van a quitar para la siguiente carrera. Y siguió soltando palabras por la boca:

"La verdad es que arruinamos todo el trabajo del fin de semana, pero, con el coche que tenemos, ahora mismo no hay quien pueda pararnos"

Amigo, Lewis, que te tengas que empezar a defender ya de la prensa inglesa que tanto te adora empieza a ser penoso. Pero que digas esas chorradas tras el monumental error que has cometido es aún más lamentable. Ah, y una cosita más, sí hay algo que puede pararte, tú mismo, tus errores garrafales te paran siempre. Y otra cosa más, un semáforo también debería pararte, aunque eres libre de saltártelo. En Francia ya sabes, 10 puestos. Veremos quién te para entonces.