"No está mal para un piloto número dos"

Mark Webber acaba de conseguir en Silverstone la que sin duda ha de ser una de las mejores victorias de su carrera deportiva. Lo es, en cierta parte, porque se acerca al liderato del mundial, pero sobre todo lo es porque definitivamente ha estallado la guerra interna en el equipo Red Bull, y la de hoy es una batalla ganada contracorriente. Lo ocurrido ayer con los alerones delanteros fue la gota que colmó el vaso de la paciencia de Webber, que hoy ha estallado tras cruzar la línea de meta.

Mark Webber acaba de conseguir en Silverstone la que sin duda ha de ser una de las mejores victorias de su carrera deportiva. Lo es, en cierta parte, porque se acerca al liderato del mundial, pero sobre todo lo es porque definitivamente ha estallado la guerra interna en el equipo Red Bull, y la de hoy es una batalla ganada contracorriente. Lo ocurrido ayer con los alerones delanteros fue la gota que colmó el vaso de la paciencia de Webber, que hoy ha estallado tras cruzar la línea de meta y en estos momentos se encuentra haciendo duras declaraciones en la rueda de prensa de la FIA.

Sinceramente, no es para menos, porque las palabras que ayer salieron de boca de Christian Horner sonaron bastante ridículas, teniendo en cuenta que a todas luces se pudo ver un trato a favor hacia Vettel respecto al australiano. "No está mal para un piloto número dos", o "si hubiese sabido cómo me iban a tratar jamás hubiese firmado la renovación", son los titulares que Mark nos deja tras una merecida victoria que seguramente marcará un antes y un después en el interior del equipo austríaco.

La carrera ha tenido un poco de todo desde el inicio. En la salida se terminaron las opciones de victoria de Vettel cuando Hamilton le tocaba por detrás y le producía un pinchazo en uno de sus neumáticos. Algo similar le aconteció a Felipe Massa, quien se topó con un Alonso que realizó una pésima salida y también se vio obligado a pasar por boxes en la primera vuelta para cambiar sus gomas. De todo ésto salían favorecidos un Webber que habría adelantado a Vettel de todas formas y un Hamilton que ganaba dos posiciones y volvía a enfilar el podio.

Al contrario de lo que dejé caer ayer, cuando dije que los pilotos que partían en posiciones impares tendrían ventaja, fueron los pilotos de las posiciones pares los que partieron por la zona limpia y obtuvieron dicho beneficio en forma de adelantamientos. Desde el propio Webber hasta Kobayashi pasando por Kubica o Schumacher.

Como en cada carrera, pasadas unas cuantas vueltas empezaron las paradas para aquellos que partieron con gomas blandas, siendo Michael el primero en hacerlo y Alonso, que rodaba quinto, uno de los siguientes. El intento estratégico de Ferrari fue el primer error de la escudería italiana, que no sólo hizo que Alonso no ganase ninguna plaza, sino que estuvo a punto de hacer que Button le adelantase posteriormente. En Mercedes, en cambio, darían en el clavo manteniendo a Rosberg un par de vueltas más que Kubica, colocándose tercero tras adelantar al polaco. Button, Hulkenberg y Alguersuari se mantenían en pista con los neumáticos duros, buscando subir alguna posición, mientras Webber y Hamilton mantenían sus respectivas posiciones en cabeza.

Alonso trataba de remontar posiciones, y en su lucha con Kubica llegó la maniobra polémica del día. El asturiano lo intentó por la parte externa en la llegada a Vale (curva 8), pero el polaco le cerró la puerta. Fernando se salió por el interior de la curva nueve, ganándole la posición a Kubica y adelantándolo, pero despertando dudas acerca de la legalidad de la maniobra en cuestión. Unas vueltas más tarde Robert se retiraría con problemas mecánicos, y la FIA sancionaría al asturiano con un drive-through. Mucho se ha discutido sobre el tema durante y después de la prueba, pero una cosa está clara: más allá de si es correcta o no la decisión, la sanción ha de ser drive-through. Adentrándonos en la maniobra en sí, puede haber dudas acerca de quién tiene la posición, si Kubica le cierra la puerta indebidamente...pero yo creo que la sanción ha sido correctamente aplicada teniendo en cuenta que Alonso obtiene una ventaja al cortar la curva y salirse del circuito (recordemos Hamilton vs Räikkönen en Bélgica 2008). Eso sí, ante la duda, en Ferrari deberían haber ordenado a Alonso que dejase pasar a Robert de nuevo cuando éste lo preguntó.

Mientras ésto sucedía, Massa y Vettel intentaban remontar posiciones por detrás, y Button se situaba quinto tras su parada, cuarto virtualmente teniendo en cuenta la penalización a Alonso. De la Rosa y Sutil peleaban por posición en la recta de meta cuando el alemán le tocó por detrás y le rompió parcialmente el alerón trasero, dejando algunas piezas del mismo en el asfalto. Eso obligaría a retirarse al piloto catalán y la salida del safety car a pista.

El coche de seguridad sería un palo para Alonso, quien debería cumplir su penalización cuando éste se retirase, y beneficiaría mucho a hombres como Vettel, quien tendría la opción de continuar remontando y meterse en zona de puntos. El alemán completaría un gran final de carrera adelantando a Massa, Alguersuari, Petrov, Hulkenberg, Schumacher y Sutil para finalizar séptimo y minimizar así su desventaja tras la salida. Fue prácticamente lo único destacable de ese último tercio de la carrera, más allá del abandono de Alguersuari y la agresividad de un Fernando Alonso que seguramente estaría enrabietado tras los errores cometidos. Ello le llevó a sufrir un pinchazo en su pelea con Liuzzi por la undécima posición, lo que le costó otras tres plazas tras entrar a boxes. Finalmente fue decimocuarto.

Por tanto victoria de Webber, que como decía al principio significa mucho más que veinticinco puntos para el australiano. Los dieciocho que ha conseguido Hamilton y los doce de Button seguro que les saben a gloria a ambos, teniendo en cuenta el pobre rendimiento de su monoplaza durante gran parte de este fin de semana. Rosberg volvió a visitar el podio por tercera vez esta temporada y por quinta ocasión en su carrera. Quinto fue Barrichello, completando una carrera sin contratiempos y logrando otro gandísimo resultado para su equipo, al igual que Kobayashi, quien terminó sexto igualando su mejor resultado en la Fórmula 1.

En "la otra liga" Lotus se llevó el gato al agua, con Trulli en cabeza tras realizar una gran salida y primera vuelta en la que adelantó a cinco monoplazas, incluído su compañero Kovalainen. Glock plantó cara a Heikki, hasta que éste le adelantó en las últimas vueltas. Los Hispania, sin embargo, estuvieron lejos de la lucha y, aunque ambos finalizaron la carrera, lo hicieron a mucha distancia del resto de competidores. Di Grassi tuvo que abandonar por problemas hidráulicos.

Analizaré más a fondo el tema Alonso-Ferrari y el Webber-Red Bull, entre otros aspectos, en próximas entradas. También actualizaré ésta con mejores fotos cuando estén disponibles.

Imágenes: Daylife